El concepcionense que vende empanadas en Villa Gesell y sueña con abrir su "localcito"


“Con un anafecito nos damos maña”. Con estas palabras, un tucumano definió cómo cocina las tradicionales empanadas tucumanas fritas, con las que deleita a la costa argentina y mantiene su estadía y la de su familia durante el verano.


Ezequiel Medina es el nombre de este oriundo de Concepción, que viajó a Villa Gesell junto a su esposa y sus hijos. Para facilitar los gastos, el grupo familiar decidió prepara el tradicional plato tucumano y venderlos para costear su viaje a la playa.
“La idea de hacer empanadas acá en la costa surgió acá. Gracias a Dios con mi señora, con el apoyo de mi familia. Ella es la que arma todo, así que bueno al otro día nos levantamos, freímos todo y salgo yo”, contó a El Tucumano, además de explicar el proceso de cocción que realizan con un pequeño anafe y una garrafa de 10 kilos, en el lugar donde duermen.
Las empanadas furor en Villa Gesell previo a su cocción
“La cosa es laburar. Cuando vos tenés ganas de laburar y de generar plata… las ganas son el amor que le tenés que poner a las cosas”, destacó Ezequiel.
Sobre cómo reciben sus clientes las empanadas fritas, este concepcionense responde orgulloso: “Les encanta la empanada. Los turistas y la gente de acá y bueno, el tucumano, el santiagueño que cruzamos a todos les gusta, gracias a Dios, eso nos pone contentos y con más ganas de seguir trabajando”.
Calentitas y ordenadas en una conservadora, Ezequiel sale a vender en los colectivos y también en la avenida Tres, que es la principal de Villa Gesell.
“El objetivo sería el próximo año poder tener mi propio localcito. Y bueno, un hornito por ahí también serviría. Un buen horno de esos pizzeros, sería un golazo, como decimos los tucumanos”, finalizó.
Fuente: El Tucumano